La idea siempre fue que todas seamos felices, cada una en lo suyo. Yo las necesito, ellas me necesitan, todas nos necesitamos, para compartir tramos de nuestras vidas que te dejan llorando o con una sonrisa de oreja a oreja… pero también es cierto que el “dime con quién andas y te diré quien eres” me pesa, porque no me gustaría -obvio- que ellas tuvieran atados por ser mis amigas. Sé que no les importa, honestamente sé que no, pero ¿cuál es mi responsabilidad de amiga en esto? Porque insisto, aunque sea una interpretación del tarot, es una posibilidad latente que a ellas les puede afectar, sobre todo en este país donde las apariencias siguen siendo demasiado importantes.
Saca el embrague, mete el embrague, acelera, frena, pasa primera, segunda, tercera… ojo con el derecho preferente de paso, disco pare, ceda el paso… ¡él tiene preferencia! Cuidado con el señor, mira por los retrovisores, señaliza a la izquierda… a la derecha… gira el volante, vira, rápido, rápido… vuelve a tu pista, gira rápido, más rápido…. Cuidado con la abuelita!... luz roja… frena de a poco… mete embrague…. frena a fondo. Saca los pies de los pedales... relájate
¡RELÁJATE!
¡Cómo me piden que me relaje después de tanta instrucción!
Debo confesar que este tema de manejo ha sido complicado… no sé si se deberá a que tengo muchos años encima, o que los nervios me traicionan, o que simplemente no estoy hecha para conducir. Bueno, de un total de 12 llevo recién 5 clases, de ellas 4 en la calle y hoy la primera con más dificultad. Veremos qué pasa al final de mis clases… mi jilguerito me consolaba por mientras diciéndome que quizás este fin de semana podamos practicar en algún sitio eriazo, donde no haya un alma a muchos kilómetros a la redonda… ¿en la luna quizás?
Definitivamente, con mi alma viajera es mejor que me dedique a volar. Me iré a desplegar un poco las alitas por ahí a ver si saco una nueva pirueta.
http://www.teamjuegos.com/
Saca el embrague, mete el embrague, acelera, frena, pasa primera, segunda, tercera… ojo con el derecho preferente de paso, disco pare, ceda el paso… ¡él tiene preferencia! Cuidado con el señor, mira por los retrovisores, señaliza a la izquierda… a la derecha… gira el volante, vira, rápido, rápido… vuelve a tu pista, gira rápido, más rápido…. Cuidado con la abuelita!... luz roja… frena de a poco… mete embrague…. frena a fondo. Saca los pies de los pedales... relájate
¡RELÁJATE!
¡Cómo me piden que me relaje después de tanta instrucción!
Debo confesar que este tema de manejo ha sido complicado… no sé si se deberá a que tengo muchos años encima, o que los nervios me traicionan, o que simplemente no estoy hecha para conducir. Bueno, de un total de 12 llevo recién 5 clases, de ellas 4 en la calle y hoy la primera con más dificultad. Veremos qué pasa al final de mis clases… mi jilguerito me consolaba por mientras diciéndome que quizás este fin de semana podamos practicar en algún sitio eriazo, donde no haya un alma a muchos kilómetros a la redonda… ¿en la luna quizás?
Definitivamente, con mi alma viajera es mejor que me dedique a volar. Me iré a desplegar un poco las alitas por ahí a ver si saco una nueva pirueta.
http://www.teamjuegos.com/